AGENCIAS
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este viernes la imposición de aranceles adicionales del 100% sobre los productos chinos, en respuesta a lo que calificó como una postura comercial “altamente hostil” por parte de Pekín, a raíz de sus recientes restricciones a la exportación de tierras raras. La medida entrará en vigor el 1 de noviembre.
Trump también ordenó controles más estrictos a la exportación de software considerado estratégico hacia China, reforzando con ello las tensiones comerciales con la segunda economía del mundo. Minutos después del anuncio, los principales índices bursátiles de Wall Street —Dow Jones, S&P 500 y Nasdaq— registraron caídas superiores al 3%, reflejando la preocupación de los mercados por el posible impacto económico de las nuevas sanciones.
En una publicación en su red Truth Social, el mandatario acusó a China de intentar “mantener al mundo cautivo” mediante el control de minerales esenciales para la producción de teléfonos inteligentes, vehículos eléctricos, armamento y equipamiento energético. Trump aseguró que no permitirá que Pekín use esa ventaja como herramienta de presión internacional.
El republicano confirmó además que no tiene intención de reunirse con el presidente chino, Xi Jinping, en la cumbre de la APEC programada a finales de octubre en Corea del Sur, rompiendo así con el acuerdo preliminar alcanzado semanas atrás, tras su conversación telefónica del 18 de septiembre.
El anuncio marca el punto más tenso entre ambas potencias desde la tregua arancelaria acordada meses atrás. Trump advirtió que los nuevos gravámenes podrían aplicarse incluso antes del 1 de noviembre, sumándose a los aranceles ya existentes que en algunos casos alcanzan hasta 145%.
