AGENCIAS
El proyecto del muro en Texas, impulsado por el gobernador Greg Abbott, avanza lentamente y enfrenta numerosos obstáculos. A tres años de su anuncio, solo se han construido 34 millas de bolardos de acero, lo que representa apenas el 4% de las 173 millas identificadas como necesarias. Cada milla ha costado aproximadamente 25 millones de dólares.
El acceso a la tierra se ha convertido en un desafío significativo, lo que sugiere que la construcción total de 99 millas podría tardar hasta 30 años y costar más de 20 mil millones de dólares. Aunque los contratistas han superado la cantidad de muro construido durante la administración de Donald Trump, el avance es aún fragmentado, distribuyéndose en al menos seis condados de la extensa frontera de 1,254 millas.
Desde 2021, el estado ha asignado más de 3 mil millones de dólares a este proyecto, que forma parte de la Operación Estrella Solitaria, un esfuerzo más amplio de 11 mil millones de dólares para abordar la crisis migratoria. Sin embargo, tanto demócratas como defensores de la inmigración critican el muro como una solución superficial que no aborda las causas subyacentes de la migración.
La preocupación por los costos y la efectividad del proyecto también se ha manifestado entre algunos republicanos, quienes advierten que se está priorizando una imagen de acción sobre soluciones reales.

