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Después de que la presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que existía un acuerdo con gobernadores, incluido el de Nuevo León, para enviar agua a Estados Unidos, incluso de la presa El Cuchillo, el gobernador Samuel García desmintió esta versión y aseguró que no se enviará agua de dicha presa. García enfatizó que Nuevo León no participará en ese envío como parte de la deuda hídrica que México tiene con Estados Unidos.
Esta postura se da en medio de tensiones por el cumplimiento del tratado de 1944 que obliga a México a transferir cierto volumen de agua al vecino del norte, situación complicada por la severa sequía que afecta el norte del país. Samuel García ha defendido la gestión del agua en la entidad, priorizando el suministro local y rechazando el uso del recurso con fines políticos o electorales.
