AGENCIAS
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, anunció este martes que su gobierno ha aceptado un alto al fuego de 60 días con Hezbolá en Líbano, bajo los términos de una propuesta impulsada por Estados Unidos. Sin embargo, Israel conservará plena «libertad de acción militar» si detecta cualquier violación por parte del grupo chií libanés.
Detalles del acuerdo
El pacto incluye tres fases principales:
- Tregua inicial: Ambas partes se comprometen a cesar las hostilidades.
- Repliegue de Hezbolá: Las fuerzas de Hezbolá deberán retirarse al norte del río Litani.
- Retirada de Israel: Las tropas israelíes abandonarán el sur de Líbano en un plazo de 60 días.
Además, se contemplan negociaciones para la demarcación fronteriza entre Israel y Líbano, cuya línea actual fue establecida por la ONU tras la guerra de 2006.
Declaraciones de Netanyahu
Netanyahu enfatizó que cualquier intento de Hezbolá de rearmarse, reconstruir infraestructura o lanzar ataques será considerado una violación del acuerdo, y que Israel responderá con contundencia. «Si lanza un cohete, cava un túnel o trae misiles, atacaremos», afirmó el primer ministro.
El acuerdo llega tras semanas de conflicto que han dejado más de 3,500 muertos en Líbano, según reportes internacionales. Netanyahu aseguró que la ofensiva logró sus objetivos, debilitando significativamente a Hezbolá tanto en términos militares como estratégicos.
Contexto estratégico
El alto al fuego permitirá a Israel redirigir su enfoque hacia otras amenazas regionales, como Irán, y concentrar sus esfuerzos en liberar rehenes de Hamas en Gaza. Además, Netanyahu subrayó que la tregua busca aislar a Hamas, quien había buscado apoyo de Hezbolá en el conflicto reciente.
A pesar de las críticas internas y la preocupación por las garantías de seguridad en el norte de Israel, Netanyahu defendió la decisión como una medida estratégica necesaria para reforzar la posición del país en la región.
