AGENCIAS
Monterrey, NL. El gobierno de Nuevo León ha recurrido a la contratación de deuda a corto plazo para cubrir una insuficiencia de liquidez temporal, ante la falta de un acuerdo para la aprobación del presupuesto de 2025. En el cuarto trimestre del 2024, la administración estatal contrató 11 créditos con obligaciones a corto plazo, por un total de 2,530 millones de pesos, provenientes de la banca comercial. La medida responde a las presiones fiscales del estado, que enfrenta un creciente nivel de deuda y un aumento en los pagos por servicio de intereses.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la deuda total del estado de Nuevo León ascendió a 102,592 millones de pesos al 30 de septiembre de 2024, lo que lo coloca como la entidad federativa con la mayor carga de deuda a nivel nacional, superando a la Ciudad de México, cuyo endeudamiento se encuentra en 96,730 millones de pesos.
En cuanto a los pagos por el servicio de deuda, el gobierno de Nuevo León reportó que, entre enero y septiembre de 2024, destinó 6,777 millones de pesos, lo que representa un incremento del 16% en comparación con el mismo periodo del año anterior, según los datos de la Secretaría de Finanzas y Tesorería General del estado.
El gobernador Samuel García ha señalado que una de las principales razones para la creciente necesidad de financiamiento es la ejecución de obras importantes como el metro de Monterrey. “No es la patita de perro que hicieron con la línea 3 de 7 kilómetros; son 41 kilómetros (de las líneas 4 y 6) y se requiere presupuesto y financiamiento”, expresó recientemente.
A pesar de los esfuerzos por renegociar el presupuesto y obtener recursos adicionales, se prevé que Nuevo León inicie el año 2025 operando con el presupuesto aprobado para 2023, de 140,037 millones de pesos, en caso de que no se logre un acuerdo en un periodo extraordinario de sesiones del Congreso local programado para enero. Esto genera incertidumbre en el manejo fiscal del estado, que aún enfrenta los desafíos derivados de su alta deuda y la necesidad de nuevos financiamientos para completar proyectos clave.
