AGENCIAS
La frontera norte enfrenta una grave parálisis debido a un cambio en los sistemas computacionales de las Aduanas mexicanas, lo que está deteniendo el flujo del comercio. Miles de camiones de exportación se encuentran atrapados en largas filas, mientras las autoridades trabajan para resolver la situación.
¡Caos en las aduanas!
Los choferes de camiones de exportación en Reynosa y Tijuana están viviendo una pesadilla. Desde el lunes, el mantenimiento a los sistemas de cómputo de las Aduanas ha causado un notable retraso en el comercio de mercancías. Manuel Sotelo, vicepresidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), informó que alrededor de tres mil 500 cargas diarias se han quedado detenidas, afectando tanto a las importaciones como a las exportaciones. Los trámites, normalmente automatizados, ahora deben hacerse a mano, lo que ha incrementado el tiempo de espera.
La espera interminable
En Tijuana, las filas alcanzan hasta 14 kilómetros de longitud, y los camiones deben esperar entre seis y siete horas para cruzar. En Reynosa, el impacto también es dramático. La paralización del sistema ha acumulado cientos de camiones, y la situación podría continuar hasta el sábado. Edgar Zamorano, presidente de Canacar en Reynosa, advirtió que el proceso sigue siendo lento, a pesar de los esfuerzos para agilizar el cruce de camiones.
Un impacto económico devastador
Las demoras están afectando gravemente la entrega de mercancías, y los transportistas, en lugar de realizar múltiples viajes, solo logran completar uno por día. La situación está teniendo repercusiones económicas, y aunque aún no se tiene un cálculo exacto de las pérdidas, se teme que las pérdidas millonarias sean inevitables si los retrasos persisten.
Soluciones temporales y paciencia
Para mitigar los efectos de la situación, la Canacar está trabajando junto con las autoridades para permitir que los choferes pernocten en sus camiones mientras esperan. Además, se pide paciencia a la población que transita por la zona, ya que las largas filas continúan. A pesar de la presencia de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano en la frontera, las demoras se deben exclusivamente a la modulación del sistema.
En conclusión, la reestructuración de los sistemas de Aduanas ha generado una crisis temporal en la frontera norte, pero las autoridades y los transportistas están trabajando para que la situación vuelva a la normalidad en los próximos días.
