AGENCIA

Esta semana, el caso presentado por Texas y otros estados contra el programa DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia) volvió a los tribunales, poniendo en riesgo el estatus de protección de más de 800 mil migrantes que llegaron a Estados Unidos siendo menores de edad. DACA les ha permitido vivir y trabajar en el país sin el temor inmediato de deportación.

El estado de Texas argumenta que DACA fue creado ilegalmente, alegando que representa una extralimitación de la autoridad presidencial y ha impuesto costos adicionales a los estados. La audiencia está programada para el jueves en el Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito en Nueva Orleans.

Greisa Martínez Rosas, directora de United We Dream Action, anunció que alrededor de 300 beneficiarios y defensores de DACA se reunirán en Nueva Orleans para exigir apoyo a las familias. Por otro lado, el Departamento de Justicia, junto con entidades como el estado de Nueva Jersey y empresas tecnológicas como Apple, Google y Microsoft, defienden el programa, argumentando su impacto positivo en la economía estadounidense.

Los jueces examinarán tres cuestiones clave: si los estados han demostrado costos reales por DACA, si la administración Biden actuó dentro de su autoridad al intentar fortalecer el programa, y si la restricción a nuevos solicitantes debería limitarse solo a los estados demandantes.