El día de ayer, la Suprema Corte del país echó por tierra una de las más duras leyes antiaborto, la propuesta de Texas HB2 que cerró más del 75 por ciento de las clínicas de aborto en todo el estado.

Aprobada en 2013 bajo el mandato del entonces gobernador Rick Perry, la ley estipulaba que las clínicas que brindaban servicios de aborto deberían tener los mismos estándares de un quirófano y requería que los médicos que llevan a cabo esta práctica tuvieran privilegios de acceso a un hospital cercano.

Desde entonces el número de clínicas en el estado pasó de 42 a sólo 19 y de haberse ratificado la ley por la corte, estas hubieran disminuido hasta únicamente 10.

El Centro para los derechos reproductivos de la mujer llamó a la HB2 una vergüenza argumentando que las mujeres rara vez requieren hospitalización y que la mayoría simplemente necesita de dos pastillas.

Uno de los jueces que votó en contra de esta ley, Stephen Breyer, aseguró que ninguna de estas provisiones ofrece suficientes beneficios para justificar los problemas que impone el poder tener acceso a un aborto.

“Cada uno de éstos significa un obstáculo sustancial para que la mujer busque un aborto, constituye un problema al acceso al aborto y cada uno viola la Constitución federal”.

EMITE ABBOT COMUNICADO

El gobernador de Texas, Greg Abbott, emitió un escueto comunicado luego de que se diera a conocer el fallo de la Corte.

“Esta decisión erosiona la autoridad estatal para hacer leyes que garanticen la salud, la seguridad y el bienestar de las mujeres y de los seres más inocentes que pierden la vida, la meta de Texas es proteger la vida inocente al mismo tiempo que aseguran los más altos estándares de salud y seguridad para la mujer”.

Por su parte, Amy Hagstrom Miller, presidente y directora de la clínica para salud de la mujer, dijo que la Suprema corte sólo confirmó lo que en su organización ya se sabía.

“Es que todas y cada una de las mujeres, sin importar donde vivan, merecen el acceso a un respetuoso, comprensivo y sobretodo con compasión cuidado de la clínica de su confianza, hoy se ha hecho justicia”.

Aprueba el fallo de Corte

El representante estatal por el Distrito 40, Terry Canales, habló sobre la decisión tomada por la Suprema Corte en relación a la ley HB2 que limitaba el acceso a la mujer a una clínica local para practicarse un aborto.

Canales explicó que si bien la ley no fue del todo negada por la corte, si rechazó las partes que eran de más problemas para la mujer.

“No totalmente la ley, pero sí las partes que causaron bastantes problemas, especialmente en nuestra región como el que las clínicas tuvieran que reunir ciertos requisitos para poder operar”.

El representante aseguró que ésta es una victoria para la mujer pues podrá contar con más opciones de salud.

“Lo que salió de la Corte va a promover que haya más clínicas de medicina preventiva, clínicas que cerraron debido a esta ley”.

“Yo no apoyé esta ley, en el Condado Hidalgo y en mi distrito hay muchas necesidades, una de ellas es el acceso a la salud de manera preventiva, soluciones a las mujeres que son de bajo recursos”.