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Estatal Por Raul Gutiérrez

Intervención del Dr. César Camacho, Presidente del PRI, en el arranque nacional de las campañas de los candidatos del PRI a Diputados Federales

¿Listos para el triunfo? Pisando firme, caminando juntos, hoy empieza la travesía rumbo a la victoria.
¡Votar es hacer política, y hacer política es hacer patria!
Hacerlo en verde, blanco y rojo: con el entusiasmo de la esperanza,  con la nobleza de la unidad, y con la determinación de las convicciones, es hacer política tricolor. Así se hace política en el PRI.
Integramos un gran ser colectivo que comparte ideales, suma esfuerzos y multiplica resultados. Estando unidos nadie nos detiene.
Somos un partido maduro y puesto al día. Participan aquí los jóvenes más activos y comprometidos; las mujeres incansables que nunca se rinden y nos inundan de energía; militan con nosotros mexicanas y mexicanos de todas las generaciones y condición social que aportan sus habilidades y experiencia por la prosperidad de nuestro país.
Somos más de 10 millones de priistas con registro decididos a hacer política por la patria, para que México viva y los mexicanos vivamos mejor. ¡En eso nos empeñamos! ¡Para eso hay partido!
Para iniciar la campaña federal decidimos venir a tierra regia. Lugar emblemático que siempre ha enseñado a hacer bien las cosas.
Fieles herederos de esa tradición, candidatas y candidatos a presidentes, síndicos y regidores, y a diputados locales han recorrido calles, trabajado sin descanso, se han comprometido con buenas causas, movidos por el rotundo argumento del ejemplo, de quien por la sensibilidad con quienes tienen menos, la acreditada capacidad para hacer política y la emoción que imprime a todo lo que hace, se está ganando a pulso el cariño y el apoyo de los nuevoleoneses. Ivonne Álvarez está dando muestra de cómo hacer una campaña exitosa, de fuerza y liderazgo al servicio de la gente. Como ella, ¡a trabajar para merecer el triunfo!
Esta mañana el PRI ratifica su vocación democr y a todos quienes reciben recursos del Estadojar pasar ninguna!odos los medios para evitar las trapaceramos por el triunfo mereática. Afortunada combinación de maneras de pensar y de actuar, la democracia es la única forma vivir en armonía.
       Nosotros que creemos en ella, sabemos que en democracia la política siempre gana; confiamos en la Ley, en las instituciones y en los servidores públicos que las personifican, y respetamos profundamente a los protagonistas de la elección: a los ciudadanos.
Por obligación jurídica, y convicción ética, estamos sometidos a la legalidad, y nos aseguraremos de que los demás también lo hagan; habremos de denunciar cualquier desapego a la ley; echaremos mano de todos los medios para evitar las trapacerías de quienes no son capaces de convencer. ¡No les vamos a dejar pasar ninguna!
Nos importa mucho la integración de esta expresión del poder público que es el soberano por antonomasia: el Poder Legislativo. Único que siendo plural y colegiado, refleja la heterogeneidad de nuestra Nación pluricultural y diversa.
La Cámara de Diputados del Congreso de la Unión tiene la tarea de legislar, que también es gobernar; y además de hacer leyes, ser la caja de resonancia de la política nacional, fiscalizar al gobierno en su conjunto y a todos quienes reciben recursos del Estado; y más aún, tiene que ser una eficaz bisagra, no sólo entre quienes gobiernan, sino espacio de encuentro de éstos con la sociedad.
Entendemos que la división de poderes debe ser vehículo para la colaboración y el diálogo, sometido a un único dogma: que la democracia rinda resultados, que sea eficaz y constribuya a la prosperidad de las familias.
La Cámara que habremos de elegir tiene una tarea histórica: completar el proceso transformador, hacer que el llamado “momento mexicano” se convierta en esperanza fundada de todos.
El reto de los futuros diputados no sólo será ganar votaciones, sino convencer en las discusiones, con la fuerza de los argumentos, para amacizar el proyecto de Nación próspera, segura y en paz, trazado por las reformas transformadoras ya aprobadas, por las que ha trabajado uno de los nuestros, el militante que más ha hecho por todos: Enrique Peña Nieto.
Como la mayoría de la gente, el PRI es desmesurado en su esfuerzo y mesurado en su conducta.
       Vamos a la contienda con razonable optimismo por saber que contamos con la mejor organización, los candidatos idóneos y la oferta política más persuasiva. Confiamos en nuestros adversarios se quedarán atrás.
Superaremos a una izquierda que, literalemente, no se halla; atada a sus contradicciones, a sus eternas pugnas domésticas; que donde puede, es clientelar como nadie; que llevó a delincuentes al poder, y desde el gobierno del Estado de Guerrero fue incapaz de combatir, sino es que solapó a los que cometieron un abominable crimen y ahora pretenden evadir su responsabilidad.
Tampoco tiene mucho que hacer en la contienda democrática el político que no estudia ni trabaja, y con los pretextos de siempre evade explicar cómo financia su costoso y eterno activismo político.
¡No van a llegar lejos!
Por otro lado, veremos la derrota de una derecha incongruente e ineficaz, que detuvo al país doce años. Primero por la frivolidad de una gestión que no supo qué hacer con el gobierno; después por la tarquedad de quien detonó una guerra tan violenta como absurda, en la que,  por cierto, tristemente también Nuevo León pagó caro.
Suponen que ya se nos olvidó qué hicieron, pero la ciudadanía tiene presente cómo son. Como su candidato a Nuevo León, cuyo legado es una leyenda negra de los giros rojos y la prostitución. ¿A poco no?
La mezquindad de dentro y fuera de su organización que les ha hecho perder dignidad y cara; y prefieren, en contrapartida, organizar bacanales con cargo al erario, a ritmo de tambora. ¿A poco no?
Han dilapidado la confianza y el respeto, por proteger intereses inconfesables, como los extorsionadores de casineros que provocaron la muerte de no pocos inocentes. ¿A poco no?
Fingen tener cualidades que no poseen, y prohíjan la corrupción que dicen combatir, aunque en Sonora la escalan, cuando son incapaces de explicar por qué la fortuna de su candidato a gobernador creció exponencialmente, cuando las finanzas del municipio que presidió entraron en quiebra. ¿A poco no?
Quieren ocultar los “moches de los mochos”; que han tejido una red de corruptelas que inequívocamente conducen a Madero. ¿A poco no?
Pretenden confundir, pues mientras acusan de corrupción, el ex presidente Calderón, que bien los conoce, dijo que la dirigencia de su partido es una coalición de intereses formados en torno a la corrupción de “ciertos líderes”. Si el sistema anticorrupción se aplica correctamente lo habrán que inagurar varios de ellos. ¿A poco no?
Los testarudos de ayer, los incongruentes de hoy, los hipócritas de siempre, van a perder y así confirmarán que su origen es destino: van a seguir siendo, simplemente, la oposición.
La mayoría va a votar por candidatos que gozan de prestigio personal, capacidad profesional, actitud para comprometerse y aptitud para servir.
Los electores van a optar por el PRI porque no sólo es el partido que más trabaja, sino que trabaja por lo que más queremos todos.
Y eso que tanto queremos es un crecimiento económico que permita mayores ingresos para alcanzar el bienestar; educación de calidad para competir, ganar y prosperar; que nadie esté por encima de la Ley, para lograr seguridad y justicia para la paz; en síntesis: una sociedad igualitaria con derechos plenos para todos.
Somos el Partido de la transformación, el de la más grande responsabilidad, el que respeta y respalda a quien, liderándonos, ejerce el poder sin buscar la fugacidad de la popularidad, sino con la responsabilidad de hacer lo que se debe; el hombre que alentó el espíritu de cuerpo en el PRI, y nos demostró que el triunfo del partido y el éxito del país sí son sinónimos, el Presidente transformador: Enrique Peña Nieto.
Compañeras y compañeros:
Con la humildad de quien sabe escuchar, con la alegría de trabajar por la comunidad, con la responsabilidad de hacer compromisos que mañana serán cumplidos, y con una política diseñada con la cabeza pero ejecutada con el corazón, ustedes, la inmensa mayoría de los nuevoleoneses, convertirán a Ivonne Álvarez en su gobernadora; y ustedes, junto con muchos millones de mexicanos más, nos darán el número suficiente de curules en la Cámara de Diputados para llevar a buen puerto una nave que tiene rumbo y timonel.
Con la fuerza de la política removeremos los obstáculos. Ganaremos sin derrotar a nadie.
Y ganar, será apenas el principio. Habremos de seguir trabajando por lo que más quieren los mexicanos: libertad, prosperidad, justicia y paz para las familias.
Intervención del Dr. César Camacho, Presidente del PRI, en el arranque nacional de las campañas de los candidatos del PRI a Diputados Federales