Kate se convirtió hoy en el cuarto huracán de la temporada de ciclones en la cuenca atlántica mientras sigue su rumbo noreste, sin que amenace zonas habitadas, informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos.

El CNH, con sede en Miami (EU), señaló en su boletín de las 11:00 hora local (16:00 GMT) que Kate presenta vientos máximos sostenidos 120 kilómetros por hora, con rachas de mayor velocidad, y se ubica a unos 635 kilómetros al noreste de las Bermudas y a 1,260 kilómetros al sursuroeste de Cabo Race Newfoundland, en Canadá.

El huracán se mueve velozmente con dirección noreste a una velocidad de traslación de 72 kilómetros por hora, indicó el CNH.

Los meteorólogos anticipan que Kate reducirá su velocidad de traslación y virará lentamente hacia el estenoreste en los próximos dos días.

Esto supondrá que se alejará de las costas de Estados Unidos y Canadá y perderá fuerza a partir de este jueves, cuando el huracán se degradará a tormenta tropical al llegar a aguas más frías.

Si se mantienen las previsiones del CNH, Kate podría afectar el fin de semana próximo a la costa oeste de Irlanda.

En el momento del último boletín, Kate se ubicaba cerca de la latitud 36.8 grados norte y 60.5 grados oeste.

Los vientos huracanados se extienden hasta 55 kilómetros desde el centro del ciclón y con fuerza de tormenta tropical hasta los 335 kilómetros.

EL CNH pronosticó que la fuerte marejada producida por Kate afectará hoy a las Bermudas, por lo que pidió a los surfistas que consulten los boletines meteorológicos locales ante el riesgo mortal del oleaje.

La temporada de huracanes, que termina el próximo 30 de noviembre, ha registrado once tormentas tropicales: Ana, Bill, Claudette, Danny -transformada en el primer huracán de categoría mayor (3) de la temporada-, Erika, Fred -huracán de categoría 1-, Grace, Henry, Ida, Joaquín, que alcanzó la categoría 4, de un máximo de 5 en la escala de intensidad Saffir-Simpson, y ahora Kate.