“Nota importante. En mi próxima carta te mandaré un artículo para El Popular, debes entregárselo a Octavio Paz o Enrique Ramírez, en cuanto se publique deben de darte 15 pesos, de los cuales puedes disponer como quieras menos enviándomelos. Que Octavio te explique cómo debes cobrar”. Así José Revueltas (1914-1976) le informó a su esposa Olivia que colaboraría en el diario El Popular, donde escribió una columna hasta hoy poco conocida: La Marea de los Días.

“Es una columna desconocida, nunca se ha incluido en sus obras completas, nadie las ha retomado porque José Revueltas no las firmó y porque no dio noticias de ésta en ningún lado, pero son 81 textos escritos de 1941 a 1942 que contienen fragmentos de su novela El luto humano”, señala Antonio Cajero Vázquez, investigador de El Colegio de San Luis, quien con Sergio Ugalde Quintana, investigador de la UNAM, trabajan en la edición de los textos escritos por el duranguense.

La Marea de los Días, comenta el experto, fue una columna que aparecería con cierta regularidad, en principio los miércoles y sábados, y luego cambió a lunes y sábados. Las fechas de publicación fueron del 30 de agosto de 1941 al 5 diciembre de 1942, con poco más de 80 entregas y fue un espacio que a Revueltas le sirvió de escaparate para sus posicionamientos políticos y morales durante la fase más decisiva de la Segunda Guerra Mundial.

Para al autor de El apando, la columna también le sirvió como laboratorio de su novela galardonada en 1943 con el primer lugar en la selección de novelas mexicanas para participar en el concurso hispanoamericano de la Editorial Farrar & Rinehart de Nueva York.

“El anuncio de los textos apareció el viernes 29 de agosto de 1941, en los siguientes términos: La plana editorial de El Popular contará desde mañana con una nueva sección llena de interés para sus lectores, ágil, viva y alegre. Éste es el resultado de nuestros esfuerzos constantes para hacer del diario del pueblo mexicano una publicación superior cada día. El Popular se ha empeñado a hacer de su plana editorial la mejor de México y para ello ha procurado reunir los mejores escritores del país, seguro de corresponder así el favor que le otorgan sus lectores. Hemos encomendado su redacción a uno de los más distinguidos escritores mexicanos”.

Pero Revueltas sólo firmó con sus iniciales un texto de esta columna, los motivos de la decisión aún se desconocen. Lo que hasta el momento identificó Cajero Vázquez es que además de discurrir sobre la guerra, la política internacional y nacional, la cultura y literatura, el autor se dio tiempo y espacio para soltar la pluma y ensayar.

“El ejemplo latente de un continiuum entre La Marea de los Días y El luto humano es el texto (que Revueltas) tituló La cobijita de Juan Pérez, que apareció el lunes 20 abril de 1942 con una nota al pie que reza: fragmento de un capítulo de una novela de JR”.

Otro pasaje de la novela cuyo germen se encuentra en los escritos del periódico, señala, es la columna titulada Hijo del hombre, del 2 de marzo de 1942, en donde el cronista reúne a un ejército de hombres de diversos oficios a favor de una causa perdida mientras éstos viven en un éxodo permanente.

Cajero Vázquez destaca que cuando Revueltas escribía La Marea de los Días, a la par, creó una de sus más reconocidas novelas. “Antes de que cerrará la columna, también tenía concluida la novela (El luto humano), que manda a Nueva York (en 1942) y en febrero de 1943 le informan que tiene el premio como representante de México para el concurso latinoamericano”.

—¿Qué temas abordó en la columna?

—Lo que le importaba era la situación política que se vivía, era el momento crítico de la Segunda Guerra Mundial, estaba preocupado por lo que pasaba en Alemania, Italia y Europa en general. Cuando se refiere a México es de ‘pasada’, se dedica más a temas que suceden en la historia universal. Habla de los sinarquistas, de los propios comunistas y uno de sus temas preferidos es Rusia y Alemania, son los puntos centrales de discusión

PUBLICACIÓN. Los textos que dieron vida a La Marea de los Días serán publicados y la primera opción es la Editorial Era, pero si no fuera posible, los investigadores buscarán otras opciones.

“Nuestro principal objetivo es que se conozca el autor y su obra, que los lectores conozcan cómo Revueltas llegó a El Popular porque tiene que ver con la sobrevivencia, con un oficio y necesidad de trabajo que a veces cubre como reportero, cronista o con notas anónimas “, explica Cajero Vázquez.

El especialista precisa que Revueltas estuvo en Yucatán desde principios de mayo de 1938 porque fue comisionado a trabajar en el pueblo Uayalceh, por el Departamento de Educación Agrícola dependiente de la SEP, empleo al que renunció por pasar “de condiciones favorables a desfavorables” y le pidió a su esposa que informará al Partido que salió a Mérida, enviado por la Comisión Nacional Juvenil del Comité Central del Partido Comunista y por el Consejo Ejecutivo Nacional de las Juventudes Socialistas.

“De la correspondencia que mantiene con Olivia se desprende que Revueltas (en 1938) conocía el proyecto editorial de Vicente Lombardo Toledano, quien entonces dirigía la revista Futuro.  En junio, ya con El Popular en circulación, Revueltas inquiere sobre la participación de sus correligionarios en la empresa editorial: ‘Sé que ya salió El Popular, será bueno que le preguntes a Ramírez cómo quedó la cosa, quienes entran ahí’, le escribió a Olivia”.

Sin embargo, por la intensa actividad del escritor en Yucatán y ocupado por las conferencias que dictó sobre educación socialista y petróleo, así como su colaboración con El Machete y Sureste, aplazó el envío de sus artículos al diario de Lombardo Toledano.

“Hasta el 2 de julio de 1938 se compromete a enviar una publicación para el diario de Lombardo Toledano, lo cual se demuestra con una carta en donde le dice a Olivia que pregunte a Paz por el pago; pero Revueltas inaugura sus colaboraciones, hasta donde hemos rastreado, el 27 de julio de 1939, cuando escribe las columnas ya conocidas: Lecturas y El alicante pinto, a las que se ahora se suma La Marea de los Días”, concluye Cajero Vázquez.